Cuando comentas con alguien que vas a París, casi siempre, te suelen decir: "Ten cuidado, que comer es muy caro", y es cierto que existe una diferencia notable de precio, sobre todo en las bebidas, pero también hay fórmulas más asequibles para no morir en el intento.
Panaderías
Ideal para el buen tiempo. Puedes llevar en la maleta chacinas envasadas al vacío y/o rellenos para sandwich, y después parar en cualquier boulangerie a comprar baguettes (más grandes que las españolas) y unas latas de refrescos, cervezas o botellas de agua et voilà. Disfruta de tu almuerzo o cena en cualquiera de los jardines y parques de la ciudad.
McDonalds o similar
Precios parecidos a los españoles; sin embargo, la comida me sabe más sosa, no sé si será el pan o la carne, salvo una especialidad que probé en Versalles con mezcla de varios quesos franceses, muy buena :)
Deli's Café
Con varios establecimientos distribuidos por todo París, es un buen sitio para tomar bocadillos variados (combinaciones interesantes y distintas), sandwiches, perritos calientes, pasteles... con buena relación calidad-precio. En los Campos Elíseos incluso ponen una terraza en verano, en la que disfrutar de café a precio razonable.
Pizza Del Arte
Cadena de restaurantes italianos donde puedes comer pizza (recuerdo una con pollo realmente buena) o pasta, con una botella de vino sin hacer locuras.
Menú diario de restaurante
Muchos bistrós o restaurantes tienen menús a 12-15 euros, lo que no deja de ser una opción interesante, particularmente para salir de la rutina bocadillo/hamburguersa en la que nos podemos ver sumergidos.
Otras opciones
Como ya comenté en una entrada anterior, una buena crépe llena bastante y las tienes tanto dulces como saladas, y pueden ser ideales para cenar.
También hay otros sitios en los que tomar bebida con acompañamiento de forma más o menos barata, como la minicafetería Bonne Journée en la entrada de metro Madeleine, o los restaurantes situados en la primera planta de la Torre Eiffel.
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