Si alguna vez has estado en París, es muy probable que hayas comprobado lo cambiante que resulta el tiempo por allí, pasando del sol al frío o la lluvia en unas pocas horas.
Pues bien, una alternativa ideal para esos días (aunque merece la pena aprovecharla en cualquier ocasión) es aprovechar la ruta por pasajes cubiertos que nos ofrece la ciudad de la luz, sitios bonitos y/o pintorescos donde podemos encontrar coquetos restaurantes o tiendas curiosas.
Podemos empezar en el área de Grands Boulevards, concretamente al final de la calle Faubourg Montmartre, casi esquina con Provence, allí comienza el Passage Verdeau.
Si seguimos en dirección a Grands Boulevards, encontrarnos el Passage Jouffroy que termina a la altura del Museo Grévin o museo de cera.
Al salir nos encontraremos en Grands Boulevards y si cruzamos a la acera situada justo enfrente, podremos conocer el Passage des Panoramas:
En dirección hacia Ópera podemos pasear por el Passage des Princes, que sigue la misma estética de los que acabamos de comentar:
Moviéndonos relativamente hacia el área del Louvre, cerca de los jardines de Palais Royal, se encuentra la Galerie Vivienne, una galería comercial con encanto y un suelo precioso:
Muy cerquita de la anterior se encuentra el Passage Colbert, al lado del famoso y cinematográfico restaurante Le Grand Colbert. Aunque está muy cuidado, su aspecto puede resultar un poco frío:
En la misma zona puedes visitar el Passage Choiseul, otra pequeña galería comercial:
Por último, en la misma área encontramos el Passage Beaujolais, casi más bien un pequeño pasillo entre dos calles:
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